¿Tiene ansiedad por la cirugía? Pruebe estas sugerencias

No le hacen cirugías todos los días. Por eso, es normal sentirse ansioso de antemano. Después de todo, hay mucho en qué pensar. Por ejemplo, pensar cómo prepararse para la cirugía, qué pasa antes y después, y cómo se sentirá cuando haya pasado. Las siguientes son algunas formas de reducir la ansiedad respecto de la cirugía.

Sea sincero con el proveedor de atención médica

Recuerde que el proveedor de atención médica recomienda la cirugía porque considera que es la mejor opción para usted. Por eso, hable con el proveedor de atención médica acerca de cualquier preocupación o pregunta que tenga, incluso si es de último minuto. Entenderá cómo se siente y querrá asegurarse de que esté lo más relajado posible.

Pruebe las siguientes sugerencias

• Obtenga más información sobre el procedimiento. Saber qué esperar y estar listo de antemano puede aliviar sus temores. Escriba cualquier pregunta o inquietud. Así, recordará hablar sobre eso cuando esté con el proveedor de atención médica.

• Póngase en contacto con otras personas que ya hayan tenido esta cirugía. Pueden contarle sobre sus experiencias. Podrá encontrar grupos de apoyo cerca de usted o en línea.

• Pida a un ser querido o a un amigo de confianza que lo acompañe al hospital o centro quirúrgico. Pueden estar allí para darle apoyo social cuando más lo necesite.

• Concéntrese en los aspectos positivos. Recuerde que la cirugía puede ayudarlo a sentirse mejor. Por ejemplo, después de la recuperación, puede tener menos dolor o ser capaz de retomar actividades que antes disfrutaba.

• Hable si siente mucha ansiedad. El proveedor de atención médica puede darle medicamentos para calmar la ansiedad.

• Distráigase. No pensar en la cirugía puede ayudarlo. Mientras espera por el procedimiento, lea un libro, escuche música o juegue.

• Use técnicas de relajación. Por ejemplo, haga respiraciones profundas, medite o piense en lugares o imágenes placenteras. Quizá quiera probar la relajación muscular progresiva. Implica tensionar y luego relajar distintos músculos, como los de la mandíbula o las manos. Empiece por la cabeza y avance hasta los dedos de los pies. Sostenga cada grupo muscular durante cinco segundos y luego relájelo durante diez segundos.

• No fume. Algunas personas fuman para reducir la ansiedad. Pero fumar puede causar complicaciones en la cirugía.

El día de la cirugía, el equipo de atención le preguntará con frecuencia cómo se siente. Sea honesto a fin de que hagan todo lo posible para que esté cómodo.