Cáncer colorrectal: cirugía

Enterarse de que padece cáncer colorrectal puede ser desalentador. A medida que vaya teniendo más información, es posible que se pregunte cómo se tratará. ¿Una opción? Cirugía. El tipo de cirugía dependerá del tipo de cáncer, de dónde se encuentre y de cuánto se haya propagado. También influirán otros factores, como sus preferencias y el estado general de su salud. 

Cuándo se necesita cirugía colorrectal

En ocasiones, el proveedor de atención médica puede detectar pólipos colorrectales o cáncer colorrectal en estadio inicial durante una colonoscopia. En ese caso, es posible que pueda extirpar los pólipos o el cáncer pasando pequeños instrumentos a través del tubo con el que se hizo la colonoscopia. Esto significa que no es necesario hacer ningún corte (incisión).

Pero no siempre es así. Podría necesitar cirugía en los siguientes casos:

  • Le hicieron una colonoscopia, pero el proveedor de atención médica no pudo extirpar todo el pólipo.  Necesitará cirugía para extirpar el resto del pólipo. Esto se hace porque el pólipo restante podría contener células cancerosas que podrían extenderse con el tiempo. La única forma de saber si un pólipo tiene cáncer es examinarlo al microscopio.

  • Le extirparon un pólipo total o parcialmente, y ese pólipo tiene células cancerosas invasivas.  El tejido del pólipo extirpado se examina en el microscopio para observar si tiene cáncer. Si se detecta cáncer y el pólipo no se ha extirpado por completo, deberá hacerse una cirugía para asegurarse de que todo el cáncer ha desaparecido. También necesitará cirugía si el cáncer está tocando el borde de la zona donde se extirpó el pólipo.

  • Usted tiene un cáncer colorrectal en estadio I, II o III.  En estos estadios, el cáncer no se ha propagado a otras partes del cuerpo, por lo que es posible que se pueda extirpar todo el cáncer mediante cirugía. Después de la cirugía, es posible que necesite otros tratamientos, como radioterapia o quimioterapia.

  • Tiene un cáncer colorrectal en estadio IV (avanzado) que se ha propagado sólo a partes del hígado o los pulmones que también pueden extirparse con cirugía.  El cirujano extirpará las zonas cancerosas de esos órganos. Es posible que necesite tratamientos adicionales, como radioterapia o quimioterapia, antes o después de la cirugía.

  • Tiene un cáncer avanzado que amenaza con bloquear (obstruir) el colon o causar otros problemas importantes.  A veces se recurre a la cirugía para solucionar problemas relacionados con el cáncer y aliviar los síntomas. Pero no curará el cáncer. Un ejemplo es el bloqueo del colon por un tumor. Para solucionarlo, el cirujano crea una colostomía. La colostomía conecta la parte del colon anterior a la obstrucción con una abertura practicada en la piel del abdomen. Esto permite expulsar los excrementos del cuerpo. Este procedimiento puede hacerse en una persona que no esté lo bastante sana para la cirugía.

Tipos de cirugía colorrectal

Hay varias cirugías que pueden tratar el cáncer colorrectal. Las tres más comunes son las siguientes:

  • Polipectomía. En esta cirugía se extirpa un pólipo. Con frecuencia se hace durante una colonoscopia. No se hace ninguna incisión en la piel.

  • Escisión local. Se extirpa el cáncer y una pequeña parte del tejido normal que lo rodea. Si el tumor no es muy profundo, puede hacerse durante una colonoscopia. También puede hacerse durante una cirugía separada.

  • Resección quirúrgica del tumor. Siga leyendo para obtener más información sobre esta cirugía.

¿Qué es la resección quirúrgica?

Durante la resección quirúrgica se extirpa parte del colon o del recto. También se extirpan los ganglios linfáticos cercanos. En la mayoría de los casos, la cirugía se hace mediante una o varias incisiones en el abdomen.

La cirugía varía en función de si el cáncer está en el colon o en el recto.

Para el cáncer de colon

Si tiene cáncer de colon, la resección quirúrgica se denomina colectomía parcial o hemicolectomía. En esta cirugía, el cirujano extirpa la parte cancerosa del colon. También se extrae una pequeña cantidad del tejido sano del colon a cada lado. También se pueden extirpar los ganglios linfáticos cercanos para comprobar si hay cáncer.

Hay dos formas de practicar esta cirugía:

  • La colectomía abierta se hace a través de una larga incisión en el abdomen.

  • La colectomía laparoscópica asistida se hace mediante instrumentos quirúrgicos largos y finos que se pasan a través de muchos cortes pequeños en el abdomen.

La colectomía suele hacerse con anastomosis. Esto significa que los extremos del colon se vuelven a coser. Se necesita una colostomía de corta duración para desviar las heces fuera del cuerpo hasta que la parte reinsertada del colon cicatrice.

Cáncer de recto

Si tiene cáncer de recto, puede elegir entre varias cirugías. El equipo de atención médica hablará con usted sobre el mejor tipo de cirugía en su caso. Dependerá del estadio del cáncer y de la localización en el recto.

Las opciones más comunes para la cirugía son las siguientes:

  • Resección transanal y microcirugía endoscópica transanal. Estas cirugías se usan para tratar algunos tipos de cáncer en estadios iniciales. No es necesario hacer ningún corte. En su lugar, la cirugía se hace con instrumentos que se introducen en el ano.

  • Resección anterior inferior. En esta cirugía se extirpa la parte del recto que tiene cáncer.

  • Proctectomía con anastomosis colo-anal. Se extirpa todo el recto. Después, el colon se une al ano.

  • Resección abdominoperineal. Se extirpa el ano y los tejidos que lo rodean, incluido el músculo del esfínter. Necesitará una colostomía permanente.

  • Exenteración pélvica. Se extirpan el recto y los órganos cercanos si el cáncer se ha propagado. Por ejemplo, la vejiga o la próstata en los hombres o el útero en las mujeres. Necesitará una colostomía permanente.

Riesgos y posibles efectos secundarios

Toda cirugía tiene riesgos. Algunos de los riesgos de cualquier cirugía mayor incluyen lo siguiente:

  • Reacciones a la anestesia

  • Sangrado excesivo

  • Coágulos de sangre en las piernas o los pulmones

  • Daño a los órganos que están cerca de la zona afectada

Riesgos comunes de esta cirugía

Algunos de los riesgos de cualquier cirugía mayor incluyen lo siguiente:

  • Reacciones a la anestesia

  • Sangrado excesivo

  • Coágulos de sangre en las piernas o los pulmones

  • Daño a los órganos que están cerca de la zona afectada

Los siguientes efectos secundarios y riesgos potenciales se relacionan específicamente con la cirugía colorrectal:

Infección

El riesgo de infección es mayor debido a las bacterias presentes en el colon. Los tratamientos prequirúrgicos pueden reducir este riesgo. La infección puede producirse en el lugar de la incisión en la piel o en el interior del abdomen. El equipo de atención médica puede tratar algunas infecciones cutáneas drenándolas y con apósitos limpios. Si se produce una infección en el interior del abdomen, es posible que necesite una cirugía adicional. El equipo también puede recetarle antibióticos.

Fuga anastomótica

Una fuga anastomótica se produce cuando el intestino se filtra en el abdomen. Esto sucede en un pequeño número de personas a las que se ha practicado una resección colorrectal. Se produce en la conexión donde se vuelven a unir los dos extremos del colon después de la extirpación. En caso de fugas pequeñas, el equipo de atención médica lo vigilará. Puede que tenga que tener cuidado con la alimentación, pero se curará sola. Sin embargo, las fugas grandes pueden poner en peligro la vida. Es posible que necesite cirugía para corregir el problema.

Obstrucción del intestino

La obstrucción del intestino se produce cuando se forma tejido cicatricial (adherencia) en el colon mientras este cicatriza. Esto puede causar síntomas como dolor, hinchazón, náuseas y vómitos. Es posible que necesite cirugía para solucionar el problema.

Colostomía o ileostomía

Es posible que necesite una colostomía o una ileostomía. En estas cirugías, un trozo del colon (o del íleon, parte del intestino delgado) situado por encima del tumor se une a un pequeño orificio (estoma) practicado en el abdomen para que los desechos puedan salir del cuerpo. El cirujano hace esto cuando no puede volver a conectar los extremos de los intestinos después de extirpar el tumor. Se coloca una pequeña bolsa sobre el estoma para recoger los desechos. Las ostomías (colostomía o ileostomía) pueden ser de corta duración o permanentes. Si la ostomía es de corta duración, el cirujano volverá a conectar los extremos de los intestinos más adelante.

Otros riesgos

También hay algunos riesgos de la cirugía para extirpar un tumor del recto. Por ejemplo:

  • Lesión ureteral.  Las lesiones ureterales pueden producirse durante la cirugía rectal. Los uréteres son los conductos que transportan la orina desde los riñones hasta la vejiga. Si el cirujano se da cuenta del daño durante la cirugía, puede solucionarlo de inmediato. A veces, no se dan cuenta del daño inmediatamente. Eso puede causar problemas a largo plazo.

  • Disfunción eréctil. La disfunción eréctil puede producirse en algunos hombres porque el recto está cerca de la próstata. La próstata está rodeada por los nervios que intervienen en la función sexual. Si estos nervios están dañados, pueden producirse problemas para conseguir o mantener una erección.

Preparativos para la cirugía

Como preparativo para la cirugía, tendrá algunas reuniones adicionales con el equipo de atención médica.

El cirujano hablará con usted sobre el procedimiento. Le dará todos los detalles de la cirugía y usted firmará un formulario de consentimiento. Al firmarlo, usted autoriza al cirujano a practicarle la cirugía. Asegúrese de hacer todas las preguntas que tenga antes de firmar el consentimiento.

También hablará con un anestesiólogo. El anestesiólogo le administrará anestesia general. Es el medicamento que se usa para que se duerma y no sienta dolor durante la cirugía. También lo vigilará de cerca durante la cirugía para mantenerlo seguro. Durante la consulta, hablarán de su historia clínica y de los medicamentos que usa.

Unos días antes de la cirugía, es posible que tenga que hacer lo siguiente:

  • Limpiar el colon con laxantes y enemas. El proveedor de atención médica le indicará cuándo y cómo utilizarlos.

  • Seguir una dieta especial

No se preocupe. El equipo de atención médica le dará instrucciones detalladas que deberá seguir.

Qué esperar durante la cirugía

El día de la cirugía, estará en un quirófano con su equipo de atención médica. En él se encuentran el anestesiólogo, el cirujano y el personal de enfermería.

Una cirugía típica implica lo siguiente:

  • Lo moverán a la mesa de operaciones.

  • Se le colocarán medias especiales en las piernas para evitar la formación de coágulos de sangre.

  • Para controlar la frecuencia cardíaca, el equipo le colocará electrodos de ECG (electrocardiograma) en el pecho y un manguito de presión arterial en el brazo.

  • El anestesiólogo le administrará anestesia por vía intravenosa en el brazo o la mano.

  • Una vez que esté dormido, el cirujano realizará la cirugía.

  • Si es necesario, el equipo le colocará un catéter urinario en la vejiga durante la cirugía.

Qué esperar después de la cirugía

Después de la cirugía, probablemente se sentirá muy cansado. Afortunadamente, podrá permanecer un tiempo en el hospital para recuperarse. El equipo de atención médica le dará más información, pero a continuación encontrará una descripción general de lo que puede esperar después de la cirugía.

En el hospital

Después de la cirugía, se despertará en una sala de recuperación. El equipo de atención médica lo supervisará de cerca. Le administrarán medicamentos para tratar el dolor.

Dependiendo del tipo de cirugía, puede permanecer en el hospital hasta siete días. Si le practican una colectomía laparoscópica asistida, a menudo podrá irse a casa antes. Esto se debe a que se usan incisiones más pequeñas que suelen cicatrizar más rápido.

En el hogar

Recuerde que tardará tiempo en curarse del todo. Téngase paciencia. Puede que se sienta débil o cansado durante un tiempo. El tiempo de recuperación es diferente para cada persona. Escuche a su cuerpo y tómeselo con calma.

El equipo de atención médica le dará instrucciones específicas sobre cómo reanudar sus actividades normales, pero esto es lo que puede esperar:

  • Puede volver a hacer algo de ejercicio, pero no debe levantar objetos pesados durante varias semanas.

  • Es posible que no pueda conducir durante un tiempo. Hable de esto con el equipo de atención médica.

  • Cuide la incisión siguiendo las instrucciones del equipo de atención médica. No se bañe ni nade. Evite estas actividades para reducir el riesgo de infección.

  • Si tiene una ostomía, tendrá que cuidar de su estoma. El equipo le enseñará cómo hacerlo antes de irse a casa.

  • Es posible que tenga una cicatriz de 5 a 7 pulgadas en el abdomen si se le practicó una cirugía abierta. Es probable que la cicatriz sea fina.

Dependiendo del estadio del cáncer, puede necesitar quimioterapia o radioterapia. El tratamiento administrado después de la cirugía se denomina terapia adyuvante. Se administra para reducir la posibilidad de que las células cancerosas restantes se propaguen. El equipo le explicará estas opciones antes de la cirugía.

La alimentación después de la cirugía 

Tendrá algunas restricciones alimentarias después de la cirugía. El equipo de atención médica le dará instrucciones detalladas. También puede hablar con un nutricionista o dietista para que lo ayude a planificar sus comidas.

Normalmente, se le aconsejará lo siguiente:

  • Seguir una dieta especial justo después de la cirugía. Es posible que reciba los nutrientes a través de una vía intravenosa. Es posible que tenga que seguir una dieta de líquidos claros hasta que sus intestinos vuelvan a moverse. Entonces podrá añadir algunos alimentos blandos y, más adelante, alimentos normales.

  • Siga una dieta baja en fibra para descansar los intestinos si se lo aconseja el proveedor. El colon puede tardar varios meses en cicatrizar. Esto eliminará la presión sobre él.

Movimientos del intestino después de la cirugía

Los movimientos del intestino tardarán algún tiempo en volver a la normalidad. Algunas personas pueden tardar hasta dos años en adaptarse por completo.

Después de la cirugía colorrectal, es posible que note los siguientes cambios:

  • Puede tener más deposiciones que antes. Algunas personas tienen siete u ocho al día en los primeros meses después de la cirugía. Aunque tendrá varias deposiciones al día durante un tiempo, la cantidad irá disminuyendo.

  • Las deposiciones también pueden ser más urgentes. Es posible que tenga que ir corriendo al baño para evitar las pérdidas con más frecuencia.

Aquí encontrará otras cuestiones que debe tener en cuenta:

  • Si ha tenido cáncer de recto, es posible que le hayan insertado una bolsa en J durante la cirugía. Esta bolsa especial retiene las heces como lo hacía el recto antes de la cirugía. El cirujano la crea enrollando el colon sobre sí mismo y grapándolo (haciendo una bolsa en forma de J). Recoger las heces hasta que pueda ir al baño le ayudará a recuperar más rápidamente un ritmo intestinal estable. Puede volver a la normalidad en tan solo unos meses.

  • En algunas cirugías, el cirujano debe crear una ostomía en el abdomen. Esta ostomía puede ser a corto plazo o permanente y ayuda a que los desechos salgan del cuerpo. Aunque pueda parecer abrumador, no se preocupe. Un terapeuta especializado puede ayudarlo a adaptarse y aprender a cuidarla.

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